lunes, 21 de noviembre de 2011

Una cerilla y una cadena de televisión


Hace unos años, creo que en el 2006 hacía mis pinitos en un espacio de la emisora local de Onda Cero en mi pueblo. Hablaba de cine, sin saber demasiado lo que decía, porque muchas veces ni siquiera había visto la película. Pero a fin de cuentas, daba mi opinión, que es lo que vale.
Recuerdo un día que la periodista (Ana Artero, por aquél entonces) me preguntó mi opinión sobre los programas del corazón, y la reciente subida de audiencia de programas hoy defenestrados como: "Aquí hay tomate" y "Dónde estás corazón". Le dije que barruntaba una explosión por saturación televisiva de estos programas y un hastío de la audiencia... me equivoqué, pero en calcular los tiempos. Porque en los albores del año 2012, parece que esta retorcida forma de hacer televisión está llegando a su fin. Y me explico; de todas las cadenas nacionales, solo Telecinco, mantiene estos programas de prensa amarilla, de improperios, griteríos y bochornoso espectáculo. Y por lo que ha sucedido en los últimos días, a esta cadena se le está acabando el crédito.

¿Y quién ha encendido la llama? El programa La Noria, con su inoportuna entrevista a la madre de "el cuco" (condenado por el caso Marta del Castillo) previo pago claro está.
He de reconocer que vi esa entrevista y sentí vergüenza ajena. Pensé que se estaba tocando fondo en lo que a contenidos televisivos se refiere; que no es lo mismo que unos colaboradores a sueldo en un programa se insulten y se chillen, a que una señora, madre de un culpable en un caso de violación y ocultación del cadáver, se la paguen unos emolumentos por ir a contar sus problemas con su hijo, y a decir, entre otras cosas, que su hijo llegaba a casa a la hora que le decía ella y que posiblemente la policía había presionado a su hijo. Esto señores, es un ultraje.
Los directores de la Noria, o aquellos que se encargan de su contenido, no han sabido calibrar los riesgos, ni tampoco conocen el devenir de los acontecimientos en la era de las redes sociales. ¿Pero quién proporcionó la cerilla para encender la llama?

El hombre es Pablo Herreros, periodista y bloguero, el cual denunció públicamente el supino escándalo de la entrevista. Hasta tal punto navegó por los confines de la red, que a la semana siguiente, "Campofrío" fue la primera marca en desmarcarse de la publicidad que sustentaba el programa. El efecto dominó siguió con otras como "El Corte Inglés, Nestlé, Bayer"... Sin embargo, el programa no claudicó en las sucesivas semanas y más allá, sacó pecho, contumaz en su error. Además, el programa había subido de audiencia, recogiendo datos de récord. Pero... solo de audiencias no se vive, más bien se muere.
La Noria sigue, de momento, pero otros acaban de caer "Resistiré" y "Enemigos íntimos" cierran hoy mismo y para siempre su emisión. R.I.P. Algo huele a podrido en Telecinco.

El resto de cadenas se han declinado por otro tipo de televisión, con formatos diferentes, por ejemplo Antena 3 reina con "Atrapa a un millón" y "Tu cara me suena", Quatro con "El hormiguero", la Sexta con series internacionales y películas, TVE1 con producto nacional sin anuncios; mientras Telecinco no solo no ha sabido ver como otras cadenas ha reciclado su programación que encima se creen los vencedores de la batalla por la "telebasura".

Yo siempre he dicho y lo mantengo, que Telecinco había inventado la gallina de los huevos de oro, porque en su programa estrella "sálvame" con 5 horas de duración diarias y 8 los viernes, había conseguido crear un formidable circo, donde no existe división entre protagonistas y noticias, pues son la misma cosa, a saber: sus propios colaboradores a sueldo son los que generan las noticias, se insultan y se demandan entre ellos, y lo peor es que la gente no deja de entusiasmarse con ello. Pero esto no va a durar siempre, ellos lo saben, imagino.

Pienso que la hoguera ya está encendida, y que las marcan que se anuncian no les gusta ni arrimarse al calorcito.
El fuego ya está hecho, y eso acelera las cosas, porque en ocasiones, queremos encenderlo pero nos cuesta, es como querer prender un leño con un mechero, es difícil y encima te quemas los dedos; pero ahora ya hay fuego, hay llamas y es tan tentador tirar cosas para ver como se queman.

lunes, 7 de noviembre de 2011

Microrrelatos 20N



Este blog tiene una larga vida, pero poco contenido, reconozco que lo he dejado abandonado mucho tiempo. Sin embargo, he decidido darle unos severos empujones y escribir todo aquello que se me ocurra, eso sí, con cierto grado de coherencia.
Hace unas semanas, vi como en el periódico "el País", en su edición digital, anunciaban un concurso de microrrelatos sobre el 20-N. Aunque no me gusta escribir sobre política y siempre la he bordeado con gran disimulo, tengo que reconocer que me encanta la política. Pero el concurso está cancelado o no sé que ha pasado con él, ello no obsta a que aquello que escribí, tenga un tenue reflejo en el vasto océano de la red. Aquí van los microrrelatos.

Soñé con un concejo abierto estatal, con una cámara legislativa única que reprensataba los intereses territoriales y poblacionales, con trescientos partidos discutiendo en ella, que había un diputado discrepante, era yo. Desperté, había dormido tanto que me dolía la cabeza.

Dirigentes de los bancos mundiales, gobiernan nuestros males. Si por sufragio no electos, me pregunto quién los ha puesto. Serán los mercados indolentes, que son sensibles a las gentes. Pero de ceder soberanía, hasta el vecino porfía. ¿Cuando cesará esta sangría?

Aquellos que mandan en la sombra, ¿reflejan mi realidad?
A los que de veras les doy una oportunidad, ¿me la devolverán algún día?
¿Como me piden que crea en ellos?, si ellos no creen en mi.

jueves, 3 de noviembre de 2011

Lo corta e insignificante que es nuestra vida


Acabo de leerme "Una breve historia de casi todo" de Bill Bryson. Es sin duda alguna, uno de los mejores libros que han pasado por mis manos. En él, he podido comprobar lo corta e insignificante que es nuestra vida. A priori, querido lector, pensarás que no es un buen elogio para un libro, pero mire usted, está equivocado.

Voy a transcribir uno de los pasajes de este maravilloso libro sobre divulgación de la ciencia; es cierto que no acostumbro a hacer esto en mi blog, pero qué demonios! es mi blog y está abierto a cualquier cosa.

Imaginar los 4.500 millones de años de historia de la Tierra reducidos a un día terrestre normal, la vida empieza muy temprano, hacia las cuatro de la madrugada, con la aparición de los primeros simples organismo unicelulares, pero luego no hay ningún avance más en las dieciséis horas siguientes. Hasta casi las ocho y media de la noche, cuando han transcurrido ya cinco sextas partes del día, no empieza la tierra a tener otra cosa que enseñar al universo que una inquieta capa de microbios. Luego, por fin, aparecen las primeras plantas marinas, a las que siguen veinte minutos más tarde la primera medusa y la enigmática fauna ediacarana (estos animales, que medían más o menos un metro, vivían en mares poco profundos, y tenían un cuerpo blando con pequeñas semejanzas con formas de vida posteriores). A las 21.04h salen nadando a escena los primeros trilobites. Justo después, emergen unas enormes criaturas invertebradas del período cámbrico. Poco antes de las 22.00h empiezan a brotar las plantas en la tierra. Poco después, cuando quedan menos de dos horas del día, las siguen las primeras criaturas terrestres.
Gracias a unos diez minutos de metereología balsámica, a las 22.24h, la tierra se cubre de los grandes bosques carboníferos cuyos residuos nos proporcionan todo nuestro carbón. Aparecen los primeros insectos alados. Un instante antes de las 23.00h irrumpen en escena los dinosaurios e imperan durante tres cuartos de hora. Ventiún minutos antes de la media noche se esfuman y se inicia la era de los mamíferos. Los humanos surgen un minuto y diecisiete segundos antes de la media noche.

Ante este imponente texto cabe preguntrarse: ¿En este día universal, cuánto dura la vida de uno de nosotros?

También debo citar, puesto que ya ha quedado en evidencia lo corta que es nuestra vida, otro pasaje del libro (y ya dejo de plagiar) en el que se descubre lo insignificante de nuestra existencia.
Bill Bryson dice en el segundo párrafo de la página número uno: En primer lugar, para que estés ahora aquí, tuvieron que agruparse de algún modo, de una forma compleja y extrañamente servicial, billones de átomos errantes. Es una disposición tan especializada y tan particular que nunca se ha intentado antes y que sólo existirá esta vez.

Además de enseñarme algo sobre el mundo que nos rodea, siempre tan complejo y misterioso, este libro me ha hecho reflexionar sobre nuestra existencia como personas, como animales, como miembros de un planeta que rebosa vida y por qué no decirlo de perfección.
Sin embargo, también me ha hecho pensar en los muchos problemas que rondan por mi vida y que al ponerlos en el mismo plano de toda la existencia terráquea, se tornan lejanos, diminutos y nimios.

Hay un sueño que me acompaña desde que tengo uso de razón, en él aparecen mis manos con unas proporciones descomunales cogiendo cosas tremendamente pequeñas, dominándolas, sometiéndolas al poder. Nunca he entendido ese sueño, ni mucho menos el porqué de soñarlo en repetidas ocasiones. Pero como todo sueño aporta una emoción, ésta puede servirnos como aprendizaje (según apunta la psicología más avanzada y experimental); bien, esa sensación es algo parecido a lo que he sentido leyendo este libro. El poder de un increible y excelso planeta, que domina a todo bicho viviente.

lunes, 24 de octubre de 2011

Y por fin, la lluvia


Había sido una noche angustiosa, como otras muchas, me había costado horrores quedarme dormido. Lo peor, es que no hay una explicación coherente para mi insomnio ocasional, porque nunca sucede dos noches seguidas.
Mi cerebro se comporta de manera efervescente ametrallando ideas y pensamientos sin solución de continuidad, de manera obtusa se niega a descansar.

Podría leer horas y horas, ver la televisión, estudiar, y cualquier actividad que requiera atención cerebral de importancia porque estoy preparado para ello. Es como si mi mente y mi cuerpo se desgajaran por unas horas y funcionaran de manera independiente, eso sí, físicamente es innegable que necesitaba descansar.
Y allí estaba yo, acordándome de conversaciones y situaciones insulsas que mi subconsciente albergaba y que afloraban entonces como una catarsis necesaria e indómita. ¿Será un proceso de expulsión de lo superfluo? es posible -me contesté. ¿Mañana seré un ser destrozado? eso es más que probable.

Entre los variopintos y obsoletos libros de mi mesilla de noche, se encontraba uno de ciencias naturales que andaba leyéndolo de manera trastabillada, en él se decía que ni la computadora más grande del mundo podría calcular la forma que adoptaría el humo que se exhala del cigarillo. Bajé de inmediato a la cocina para comprobar empíricamente la forma de mi humo.
Era sinuoso y azaroso, evanescente y embriagador. Así pasé unos minutos sin nada mejor que hacer y sin un miserable bostezo que me dijera que la vigilia llegaba a su fin.

A esas horas de la madrugada, en un pueblo apenas hay sonidos, quizás el recóndito ladrido de un perro, el chasquido de la madera, el inmutable zumbido de las fábricas del turno de noche o algún coche que pasa. Al no haber nada que contamine los sonidos, puedes escuchar como suena el caucho de las ruedas al friccionar con el asfalto; además puedes pensar en eso durante un periodo considerable de tiempo.
Es asfixiante lo despacio que corre el reloj cuando no puedes dormir, es extraño comprobar que ni tu postura favorita te relaja, es preocupante las partes de tu cuerpo que te pican y necesitan imperiosamente ser rascadas - nunca me había rascado ahí -pensaba para mi adentros. Y estuve meditando sobre ello largo tiempo.

Al final y fruto de la experiencia, asumí que no iba a dormir y que lo mejor era rendirme. Someterme a los apóstoles insomnes y dejarse llevar por ellos, al fin y al cabo, ya estaba agotado de tanto luchar. Ese cansancio hizo que me quedara dormido, de manera profunda. Tan honda que cuando el despertador sonó, la alegría de comprobar que me había dormido chocó contra la amargura del cruel despertar.

La furia se adueñó de mi, no tenía ganas de hablar, mal humor e irascibilidad serían la tónica del día. Era el precio que había que pagar por una noche así, larga y oscura.
Sin embargo, salí a la calle y vi como las nubes se cernían sobre un cielo ya encapotado. Era un día triste y gris, que vaticinaba escalofriantemente mi estado de ánimo.
Después de un más que largo verano, que había llegado a penetrar en el otoño adueñándose de él, comenzaron a caer las primeras gotas de lluvia, inusitada hasta hoy.
Y por fin, la lluvia - pensé. Ya iba siendo hora. Abrí la ventana de mi coche e inhalé una importante dosis de ese característico olor, que casualmente el libro decía que era a partículas de ozono. Me sentí reconfortado.
Enseguida asumí que debía quedarme con esa sensación tan placentera y usarla para que mi estado de ánimo cambiara; porque como dijo Heródoto hace mucho tiempo "tu estado de ánimo es tu destino".

lunes, 18 de julio de 2011

La iracunda transformación del movimiento 15M


Para mí, el movimiento 15M nació esperanzador y vigoroso, supo sobreponerse a la incertidumbre de las primeras tempestades, y gozó de una inusitada respuesta política, más que aceptable.
Obviamente el movimiento no podía quedarse ahí, debía seguir adelante, es cuando comenzó a desfondarse, quedándose a la deriva. El gigante con los pies de barro.

Todo comenzó con el alegato ante la indiferencia y contra la insurrección política de Stéphane Hessel, diplomático y miembro de las Naciones Unidas. Aquellos textos tenían enjundia y fueron calando en la sociedad, aderezado con nuestra autóctona corrupción cómodamente instalada en nuestra lobotomizadas cabezas, y el pasotismo ilustrado de la crisis económica que mostraban nuestros representantes políticos, fraguó el cóctel del cambio y de la indignación. De repente sonó el despertador y todos fuimos Sol.
La acampada en la capital de España no causaba otra cosa que asombro, pasmo y a los políticos estupor. ¿Cuándo se irán? – Se preguntaban miedosos. Parece que se han enfadado. – Codeaba un político sudoroso a otro colega.
Aquellos primeros días denotaron una falta de organización que en absoluto mermó los rápidos resultados, pero la ausencia una jerarquía e incluso la figura de un líder, junto con una indefinición clara de los contenidos del movimiento, acabó pasando factura.
Las agresiones a los políticos entrando a las Cortes Valencianas, el hostigamiento al Alcalde Madrid cuando paseaba plácidamente a su perro y varios altercados ilegales más, se hicieron bajo el manto de un nuevo e iracundo movimiento 15M.
El todo vale es un estado de derecho es peligroso, tanto para el pueblo soberano como para el poder ejecutivo.

El pasado 5 de julio, un inmigrante se intentó colar en el metro del barrio de lavapiés, lo que propicia que el vigilante de seguridad llame a la policía. Cuando ésta llega trata de identificar al individuo, que se niega, lo que obliga a la policía a trasladarlo a dependencias para tomarle las huellas; sólo para saber quién es esa persona y no para proceder a su detención por colarse en el metro. (que no estamos en Korea del Norte) Por allí pasaba una manifestación ya pervertida del 15M, que al ver la escena, increpa a la policía tachándola de racista. La multitud se agolpa en contra de las fuerzas y cuerpos de seguridad, lo que les hace huir de manera indecorosa.
Días más tarde, en neo-movimiento 15M, evita la detención de un senegalés que traficaba con droga, en el mismo barrio madrileño. Acusando a los Agentes de Cuerpo Nacional de Policía de estar efectuando una redada racista.
Y yo me pregunto ¿Cuál será el siguiente paso?, ¿Qué le ha pasado a este movimiento que exige democracia real y no cree en los únicos que de verdad la pueden hacer valer?, ¿No queréis policía en vuestro nuevo país?, ¿Quién controlará el cumplimiento de las nuevas leyes que dictéis?

El movimiento que insuflaba miedo en los políticos, ahora me lo provoca a mi.
Resulta curioso que hace más de 2000 años, Platón anunciaba que un país debía tener 3 partes innegociables, que eran: la parte sensitiva los productores, el pueblo que se ocupaba de proveer los víveres necesarios para la comunidad; la segunda clase eran los guardianes, los irascibles, con dos misiones defensa-ataque y la vigilancia de los posibles desmanes de riqueza de la clase superior; por último los gobernantes, alumbrados por su alma racional que velarían por el interés general, además de educar a los irascibles a que controlen los abusos de los sensitivos.

jueves, 7 de julio de 2011

Pongamos que hablo de la SGAE


No acostumbro a disertar sobre casos abiertos, pendientes de sentencia judicial. En el caso de la SGAE tendré que hacer una excepción.
La SGAE, en una institución privada, dicen auspiciada por el Gobierno que le da cobijo, que ha inventado una formidable fórmula para aumentar emolumentos a diario. La SGAE recauda un impuesto a empresas tan variopintas como barberías, salones de bodas, Ayuntamientos y el sursum-corda. Reconozco que es el negocio perfecto, al que sumamos en canon digital. El sistema está estructurado para que en algún momento de nuestra vida debamos contribuir a tan noble causa, los derechos de autor.
Se dan situaciones tan inverosímiles como el claudicar por comensal en un banquete nupcial, a tanto por oreja digo yo; o por tener la radio puesta en un taller de costura, aunque sea radio María, con todos mis respetos a sus oyentes.
Pues bien, inventada la gallina de los huevos de oro, los ávaros no decepcionan nunca, no contentos con solucionarse la vida, a ellos y a los artistas disecados (aquellos que viven del cuento, todos sabemos quienes son) urden otra trama para desviar capitales y cometen delitos societarios y no sé cuantas acusaciones más.
Me permito el lujo y el gusto de criticar a esta serie de individuos, ya que los indicios son tan palmarios que ya están en prisión preventiva. Aquí no se salva ni el apuntador, si se tratare de una obra de teatro de esas que pagan derechos de autor.
Yo ya no se que causa más estupor, si ir a tu chalé de vacaciones y encontrar que te lo han desvalijado o poner las noticias y ver a esta panda.
Decía el filósofo Bertrand Rusell que el acto más justo es aquél que debidamente meditado probablemente será el más afortunado. Esta gente, ha meditado como producir el mayor efecto en sus bolsillos, hostigando a la mayor gente posible, afortunándose ellos mismos al cuadrado. Me gustaría que pagasen por lo que han hecho, pero no con cárcel, sino devolviendo hasta el último céntimo que nos quitaron, que falta nos hace. Que lo devuelvan todo, ójala.
Siento haber pasado por el forro la presunción de inocencia de estos tipos, pero la duda ofende.

sábado, 14 de mayo de 2011

¿Estamos ante el peor momento de la juventud?


Piensen por unos segundos cómo ven ustedes a la juventud.
La mayoría coincidirán en que la juventud está perdida, que cada vez son más maleducados, irreverentes, informales, sin respeto a nada…
¿Cuántas veces han escuchado esa misma cantinela? No les parece que decían lo mismo de usted cuando era joven…
Tómese un tiempo para leer y sobre todo para meditar, lo que decían hace ya algún tiempo, aquellos que se dedicaban al noble oficio de pensar.

Nuestra juventud gusta del lujo y es mal educada, no hace caso a las autoridades y no tiene el menor respeto por los de mayor edad. Nuestros hijos hoy son unos verdaderos tiranos. Ellos no se ponen de pie cuando una persona anciana entra. Responden a sus padres y son simplemente malos. Sócrates (470-399 a.C.)

Ya no tengo ninguna esperanza en el futuro de nuestro país si la juventud de hoy toma mañana el poder, porque esa juventud es insoportable, desenfrenada, simplemente horrible. Hesíodo (720 a.C.)

Nuestro mundo llegó a su punto crítico. Los hijos ya no escuchan a sus padres. El fin del mundo no puede estar muy lejos. (Sacerdote del año 2.000 a.C.)

Esta juventud esta malograda hasta el fondo del corazón. Los jóvenes son malhechores y ociosos. Ellos jamás serán como la juventud de antes. La juventud de hoy no será capaz de mantener nuestra cultura. (Vaso de arcilla las ruinas de Babilonia)

Imagino que aún estarán presos de la estupefacción.
Después de lo arriba dicho no queda mucho por decir sobre el tema, tan sólo una pequeña reflexión.
No todo es como se dice que es. Como mejor podemos hacernos una idea de cómo son las cosas es mirando hacia atrás, y una vez allí, volver a donde estamos.

miércoles, 13 de abril de 2011

El derecho a la sindicación, la función de los sindicatos y la fuerza de la negociación colectiva.


Resulta cuanto menos paradójico, en la época en la que nos vemos inmersos los españoles, de hablar de los derechos del ámbito laboral.
Pero es precisamente en estos momentos, cuando la cifra de paro se alarga peligrosamente a los 5 millones y el trabajo o la falta de él, es el primer tema de preocupación, cuando los derechos se tienen que hacer valer. La pregunta es ¿Lo hacemos?

¿Qué son los derechos del ámbito laboral? Son aquellos derechos reconocidos en la Constitución Española (en adelante CE) que regula la libertad sindical, la negociación colectiva, la huelga, la fuerza vinculante de los convenios, la medidas de conflicto y el derecho/deber de trabajar.
Es obvio que en nuestro estado de derecho, social y democrático, hemos de aceptar estos derechos como una función básica de defensa y promoción de los intereses económicos y sociales. Además, es la propia CE ha incluido algunos en la parte más protegida, la parte fundamental de los derechos.

La libertad sindical en primer lugar quiere decir que todos tienen el derecho a sindicarse libremente, nadie puede ser obligado a sindicarse. Este derecho corresponde a todos los trabajadores, tanto nacionales como extranjeros. Incluso los trabajadores ilegales tienen derecho a sindicarse, e ir a la huelga.

¿Qué es un sindicato?*1 Es una asociación de trabajadores constituida para la defensa y promoción de intereses profesionales, económicos o sociales de sus miembros.
En España tenemos un sinfín de sindicatos, entre ellos no se hablan en la práctica, pero sí suelen posar en la foto con leve sonrisa. Ello ya denota una oscura práctica, que se refrenda con el bolo alimenticio que reciben del Estado, pues están financiados con dinero público. Además, si estás afiliado debes pagar unas cuotas, que se diluyen en cursos, viajes y otras prebendas. Por lo que a nivel funcional, parece más un sindicato vertical franquista que una organización en pro de los derechos de los trabajadores. ¿Cambiará la Ley para que los sindicatos se autofinancien con dinero de sus afiliados? Sin duda, eso sería lo ideal, pero como hemos apuntado, el propio TC*2 está prohibida la obligación de sindicarse y las presiones para hacerlo.
No obstante, la representación sindical es sobre todos los trabajadores y no sólo de los afiliados.

Tampoco, como es lógico, se puede despedir a un trabajador por pertenecer a un sindicato, el propio TC lo reconoce como despido nulo. Aunque, en la realidad, te asegura más pertenecer a un sindicato, que no pertenecer, para asegurar tu puesto de trabajo; ya que así entras en la corruptela que supone algún que otro sindicato que calla y otorga con sepulcral silencio. Véase algunas empresas con ERES fraudulentos en conveniencia con los delegados sindicales.
Todo ello viene, a buen seguro, por el Estatuto de los trabajadores, que propone la representación colectiva de los trabajadores en clave de colaboración con el empresario, colaboración a todo trance parece ser.

¿Para qué sirve un sindicato?
Últimamente para bien poco; para convocar alguna que otra huelga de paupérrimo seguimiento y poco más. Sirve más para defraudar que otra cosa.
La huelga, que es otro derecho fundamental en defensa de los intereses, fue en palabras de la Doctora en Economía María Blanco González “La HG29S*3 es un lujo que no nos podemos permitir" en el estado en el que está nuestra economía. El seguimiento de este paro se debió más a los actos de vandalismo que se registraron durante la jornada que a la adhesión de los trabajadores porque, a mi juicio, la gente es consciente de que no nos podemos permitir ese lujo".

Tampoco parece que los sindicatos luchen mucho por los intereses nacionales. Están más por hacer crecer las subvenciones que reciben del Estado y hacerse fotos. En ocasiones también dicen que están enfadados y representan histriónicos mítines que causan estupor.
Últimamente además, ni siquiera censuran huelgas salvajes como las del metro de Madrid o la de los controladores aéreos. Por cierto, esta última resuelta por un mediador, entre otras cosas, para limar la obstinada posición del propio sindicato de los controladores, enrocado en posiciones extremas. Es curioso que la huelga que verdaderamente paralizó a España y que mereció la declaración de Estado de Alarma por primera vez en nuestra historia democrática, sea resuelta por un mediador.

En el ámbito local, en las delegaciones sindicales de empresas medianas, los sindicatos, al menos los que yo personalmente conozco, han hecho el más enorme y vergonzoso ridículo; a saber, han callado ante despidos en masa viendo como la gente que se quedaba en la empresa estaba obligada a hacer horas extras (está prohibido por ley); aceptan que las empresas agoten el tiempo máximo en pagar a los trabajadores antes de ponerlo en conocimiento de inspecciones laborales; miran para otro lado cuando se tiene a trabajadores sin contrato (lo cual revienta la lista de parados); por no mencionar aquellas empresas donde todo el mundo sabe que los sindicalistas cobran un poco más por directamente callar.

Lo único positivo que cabe decir, es en alusión a otro derecho fundamental, es la fuerza vinculante de los convenios, que recoge la CE. Los titulares de este extraordinario derecho son las partes sociales, los representantes en las empresas de los trabajadores.
Por la falta de acuerdo en la redacción, la CE es otra vez ambigua y posee una estructura abierta que da pie a una suerte de soluciones en cuanto a la negociación. Es donde he visto resultados más positivos, en los convenios de empresa, o de departamentos dentro de una administración pública. El ámbito de este convenio es libre y además es fuente de derecho objetivo dentro del ámbito laboral.

En vista de lo narrado, con esta ultima salvedad, cabe hacerse algunas preguntas:
¿Merece la pena estar afiliado a un sindicato?
¿Debería el poder legislativo modificar las condiciones orgánicas de los sindicatos?
¿Debería el Gobierno controlar la callada por respuesta de las organizaciones sindicales en las empresas?
Incluso me atrevo a decir: ¿Se ha agotado en ámbito de acción de los sindicatos y ya no sirven para nada?

Por último y a modo de conclusión citar aquí un fragmento de un artículo recogido de la iniciativa de “voto en blanco” .
Décadas de dinero fácil y de sometimiento al poder dejan huella y han convertido a los sindicatos españoles mayoritarios en organizaciones podridas y alejadas de los verdaderos intereses de los trabajadores. La degradación del sindicalismo español quedó en evidencia cuando los sindicalistas alemanes, presentes en España con motivo de la visita de Ángela Merkel, declararon sentirse orgullosos de su financiación, limpia y democrática, a cargo únicamente de las cuotas de sus afiliados, una afirmación que sacó los colores a los subvencionados Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo. *4

*1 Definición RAE
*2 Tribunal Constitucional
*3 Huelga General del 29 de septiembre 2010
*4 Autor Eugenio Este

lunes, 3 de enero de 2011

2011 llega sin humo


Por fin se aprobó la ley "antitabaco". Ya tardaban, nada más y nada menos que cinco largos años de escuchar a los quejumbrosos fumadores decir aquello de: Es que no nos dejarán ni fumar! Pues mire por donde ha llegado el día en el que de una bofetada, le quitan a uno el cigarro.

Como siempre, aquí, vamos a remolque de los demás países donde nos gusta mirarnos; otrora los UK, Francia, Italia y muchos más, ya lo habían hecho, con éxito. Pero nosotros hemos tardado cinco largos años desde aquella primera ley que fue una chapuza.
Como fue una ley blandengue todo aquel que quería incumplirla lo hacía, sin más problemas, empezando por las Comunidades Autónomas y acabando por cualquier bar/pub/disco, superase o no los manidos 100 metros. Por eso esta ley es más restrictiva y dura; se recorta de este modo el espacio de actuación que pudiesen tener las Comunidades Autónomas a la hora de adaptar la norma. Directamente se prohibe fumar en todo aquél lugar cerrado.
Menos mal que esta vez si se ha hecho bien.

Ahora llega el momento de la verdad... ¿Se cumplirá? He de reconocer que tengo mis dudas, somos especiales, somos Españoles, somos impredecibles; capaces de lo mejor y lo peor a la vez. Hoy, me he paseado por algunos bares con extrema curiosidad, he entrado a tomarme un cortado y no he visto fumadores. Debería esperar a los datos oficiales, pero parece ser que la cosa funciona. Sí que he notado una cosa, más terrazas con estufas y eso sí que es alentador.

Hace dos años viajé a Irlanda, allí ya no se fumaba y los bares y los pubs irlandeses estaban llenos de gente. Tampoco se fumaba en las discotecas y créanme, era espectacular. Cuando llegabas a casa no te olía la ropa a rayos; incluso si no estaba sucia podías usarla otra vez y así no tenías que lavar tanto, me hubiera quedado a vivir allí.

Pero volviendo a España, y su actualidad, en estas últimas semanas, algunas estomagantes cadenas de televisión no han parado de hacer encuestas y programas debate sobre si fumar o no. Y yo les digo: amiguitos, da igual debatir, ya está prohibido. En España no fuma el 70% de la población y mueren al año 1.200 fumadores pasivos y 50.000 activos (INE). ¿Qué más datos ofrecemos? ¿Que los hosteleros perderán? No lo entiendo, pues todos estarán en la misma condición.
Ya va siendo hora que nos demos cuenta que con esta ley lo único que se pretende es que se deje de fumar y que se termine con la molestia que causa el humo a los no fumadores.

Y saben lo mejor, que yo soy fumador, y estoy enormemente feliz.

(N de A: debería invertir en estufas)